En la lectura de
estos capítulos surgen más preguntas filosóficas como: ¿existe una materia
prima de la que todo lo demás está hecho? ¿El agua puede convertirse en vino?
¿Cómo puede la tierra y el agua convertirse en una rana? preguntas que dichas a
simple vista son muy bobas pero que tratamos de darle solución, la pregunta que
más me llamo la atención fue: ¿el agua se puede convertir en vino? ya que
cuestiona nuestra fe acerca de si Jesús convirtió el agua en vino en las bodas de Caná, pienso que la filosofía
en algunas preguntas nos hace
cuestionar nuestra fe pero no hay que tomarlo de esta manera, por mi
parte yo estoy completamente segura de que Jesús convirtió el agua en vino ya
que esa es mi fe, pero también nos hace pensar de otra manera, como si hubiera
alguna manera de científicamente convertir el agua en vino.
Es importante tener
claro a qué tipo de proyecto filosófico
vamos a investigar ya que un filósofo no está obsesionado en todas las
preguntas filosóficas. Algo que me llamo la atención es lo siguiente: cuando
nos referimos a un filósofo tenemos que hablas de <él> ya que la historia
filosófica está marcada por hombre ya que desde la antigüedad a la mujer se le ha
reprimido de sus capacidades intelectuales y de sus pensamientos lo que me
parece muy injusto e importante para que las mujeres empecemos a descubrir el mundo de la filosofía.
Encontramos en la filosofía varios tipos de filósofos, los
que cuestionan a la naturaleza, al ser humano y a un ser superior; retrocediendo
en la historia observamos que a los filósofos griegos se les decía
<filósofos de la naturaleza> ya que se planteaban preguntas acerca de la
naturaleza y sus procesos, ellos querían
entender los sucesos naturales sin la necesidad de los mitos y creencias se puede decir que estos filósofos
dieron una manera científica de pensar.
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